Ya lo conocimos el año pasado y nos gustó tanto que hemos querido probarlo de nuevo aunque nos ha decepcionado.
El color es precioso y la apariencia impecable, piel de cebolla con destellos brillantes y acerados.
En nariz pierde algo de atractivo ya, fruta de hueso, flores marchitas y alguna nota tropical que parece que ni ella misma sabe qué pinta ahí.
En boca, de entrada suave y rectilíneo, con un amargor leve que aparece de repente al final y te deja la misma cara que una factura inesperada a final de mes.
Posgusto medicamentoso envuelto de piel de cítrico y calidez.
Confiamos en que el año que viene nos vuelva a sorprender, está claro que no es su mejor año.
Catado el 9 de junio de 2017
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