De capa alta, color castaño y ribetes teja, lágrimas densas y muy lentas que se quedan en el cristal y dejan sus huellas impresas desde un trago hasta el siguiente.
En nariz aparece un centro donde se percibe fruta negra muy madura, tonos ahumados, tostados y vainilla.
En boca es potente, con los taninos a flor de piel, carácter y garra.
Con cierto punto salobre y licoroso, devuelve fruta roja muy madura en boca así como notas balsámicas y regaliz en la retronasal.
Tiene buena densidad y recorrido, poca astringencia y resulta original.
Catado el 25 de enero de 2019
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