DE LA MAR EL MERO 2019

 

Amarillo pajizo con ribetes dorados algo evolucionados. Limpio y brillante, forma lágrima.

En nariz te envuelve con buena intensidad a pesar de tener ya dos años regaládonte un centro de fruta tropical adornado de sutiles pinceladas de flores blancas y un fondo de goma de borrar, heno y  pomelo.

En boca es amplio, untuoso y envolvente; con su acidez característica muy bien integrada y con el amargor cítrico justo.

De tacto untuoso y buen recorrido en boca se siente jugoso y rico.

Retoma su camino de gloria con pinceladas cítricas y heno a la vez que se percibe cierto encaje salino a la vez que prolonga su sabor con un final cítrico.

Nos ha sorprendido gratamente. 

Catado el 15 de febrero de 2021

GODINA 2018

Color castaño con ribetes picota; denso al movimiento deja lágrimas lentas y compactas.

En nariz su aroma es complejo, con buena intensidad y muy suculento y atractivo.

Presenta un centro de fruta negra con moras ciruela pasa y notas de regaliz al que le sigue un fino encaje de caja de habanos y suero de yogur. Al fondo junto a pinceladas de vainilla, cacao y recuerdos de hierbas aromáticas se deja ver un punto de caliza.

De paso muy suave y amplio, con cuerpo.

En su sabor se percibe redondo, goloso, amplio y carnoso. Recrea notas dulces, recuerdos de fruta negra, pimienta de Jamaica y cardamomo.

Taninos redondos y con muy poca astringencia. Su acidez bien integrada, dota de frescura a este titán.

Prolonga su sabor con un final especiado mientras ascienden a la nariz sutiles notas especiadas y balsámicas.

Más que rico, brutalmente rico y muy recomendable.

Catado el 8 de febrero de 2021

ALIQUINDOI 2020

 

Intenso color picota oscuro con ribetes granate.

En nariz se percibe complejo y original con un frente frutoso que bien nos recuerda a una mermelada de ciruelas dejando en un segundo plano notas de tomatera y laurel. Pasadas las primeras copas se atisban pinceladas de toffe y pan de higo. Tela de original.

De entrada suave y cariñosa, amplio y con sensación de volumen, con intensidad en el ataque y una acidez que lo hace fresco y ligero haciendo que la botella dure lo justo. 

En su sabor se muestra muy rico, con recuerdos de mora y monte bajo.

Da la sensación de que aún le queda recorrido en botella pero está muy rico y es recomendable.

Catado el 8 de febrero de 2021

TERRALBA Ecológico 2020

 Color amarillo pálido, brillante y forma lágrima.

En nariz se percibe goloso y expresivo; asoman recuerdos de zumo de manzana, albaricoque, notas mantecosas, bellotas, y un fondo arcilloso con sutiles pinceladas de flores silvestres.

En boca presenta un paso muy suave, sedoso, con mucha amplitud, graso y con cierta densidad.

En su ataque se muestra goloso, haciendo un guiño a fruta de hueso y cierto telón herbáceo muy refinado.

Su acidez, muy bien integrada, lo hace vivaz y de trago rápido y amable. Con la frescura justa como para retenerte y deleitar el que sin duda alguna, es un gran vino blanco de albariza.

Prolonga su recorrido con recuerdos asilvestrados y pinceladas de flores, piel cítrica y tiza.

Catado el 4 de febrero de 2021

CASTRO CANDAZ 2019

 Castaño oscuro, ribetes picota, evolucionado, con capa alta, forma lágrima aunque no se percibe denso al movimiento de la copa.

En nariz presenta un frente de notas terrosas que recuerdan a hongos y a hortalizas seguido de tinta, especias, vaina de vainilla y cedro

En boca presenta buena entrada, suave aunque altivo, presenta la acidez propia de los tintos atlánticos y que lo dotan  de mucha frescura.

En su sabor se perciben especias, picantes y cereza. Marca los taninos y recrea una leve astringencia.

En su retorno deja un leve amargor y un retrogusto muy especiado.

Catado el 25 de enero de 2021

MIQUICHOTE 2018

En su color se percibe un centro picota con ribetes granate; lágrimas compactas, cubierto y dando sensación densa al movimiento de la copa.

En nariz se equilibran bien los matices cedidos por la madera y, si bien en un primer momento ganan protagonismo, no tardan en dejar paso a la fruta.

Así pues se adelantan en un principio las notas de caja de habanos, finos tostados y coco dejando atrás un centro de fresones maduros, moras y regaliz.

Tras su ataque su acidez pierde equilibrio y se abre como si el vino estuviera roto o, al menos es la sensación que da en un principio ya que tras ese ataque vuelve a retomar el camino de la fruta en un fondo especiado, surgiendo de eses caos, deliciosas notas de mora y monte bajo que son ya una firma de la casa. Esa acidez inusual resta calidad al conjunto si bien, la botella ha caído enterita pues a pesar de estar lejos de ser la mejor versión de este vino, no ha dejado de ofrecer matices y de evolucionar copa a copa dentro de sus posibilidades.

Está claro que la salud de un vino corre la misma suerte que corre la salud de su artífice.

Tras probar hace poco la añada 2019 está claro que Miquichote es como el Ave Fénix.

Catado el 31 de enero de 2018